Acuerdos de gestación subrogada - Emparejamiento y requisitos previos
Existen numerosas cuestiones que deben abordarse para que el padre o la madre previstos se unan a la portadora gestacional o a la madre de alquiler (y a su cónyuge o pareja, en su caso). Todas estas cuestiones deben abordarse antes de cualquier intento de redactar el contrato legal necesario entre las partes. Si estas cuestiones no se abordan de antemano, el proceso de contratación puede fracasar o no ir muy bien.
A continuación se exponen los puntos que deben tenerse en cuenta antes de redactar el contrato. Muchas de estas recomendaciones proceden de las directrices y recomendaciones más recientes publicadas por la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) sobre el uso de una portadora gestacional:
- Formularios de antecedentes completados. Es importante que las partes se conozcan realmente y los formularios de antecedentes son una forma de iniciar ese proceso. En última instancia, estos formularios también pueden ayudar a los abogados en el proceso de redacción del contrato.
- Seguro médico para la madre de alquiler. Si la madre de alquiler no tiene seguro médico, esto puede ser un gran impedimento para el éxito de cualquier acuerdo. Si tiene dicha cobertura, un profesional cualificado debería revisar su plan o póliza de seguro médico completo antes de firmar cualquier acuerdo de subrogación, para asegurarse de que no tendrá problemas con la cobertura de maternidad. Una revisión del seguro también puede identificar otras cuestiones relevantes, como la forma en que se utilizará una cuenta de ahorros de salud, si un plan de seguro ofrece algún programa especial para miembros embarazados, si la atención médica estará o no cubierta por salir de la red, y mucho más.
- Autorización médica. Si los futuros padres aportan el esperma y/o el óvulo que se utilizará para formar el embrión, deben someterse a un examen médico antes de la creación del embrión para minimizar el riesgo de cualquier enfermedad que pueda transmitirse a la portadora gestacional. La portadora gestacional debe ser autorizada primero por su propio ginecólogo para volver a quedarse embarazada y luego también debe ser examinada para detectar cualquier cosa que pueda transmitirse al niño en el útero. Si está casada o tiene otra relación de larga duración, su cónyuge o pareja también debe someterse a un examen médico para detectar cualquier cosa que pueda transmitirse a la portadora gestacional.
- Asesoramiento médico. Todas las partes deben recibir asesoramiento sobre los aspectos médicos del acuerdo, incluidos los riesgos que conlleva la transferencia de embriones y los riesgos de embarazo y de pérdida del mismo.
- Autorización y asesoramiento en materia de salud mental. Todas las partes deben ser examinadas por profesionales de la salud mental antes de llegar a un acuerdo de portadora gestacional. La madre de alquiler o la portadora gestacional pueden ser sometidas a un examen algo más intenso por diversas razones. Además, las partes deben participar en un grupo de asesoramiento antes de cualquier embarazo para garantizar una comunicación abierta y eficaz a lo largo del acuerdo. Un asesor cualificado también puede ayudar a las partes a trabajar en muchos de los puntos que finalmente se incluirán en el contrato, como por ejemplo, abordar las cuestiones relativas al aborto y la reducción selectiva, el nivel de comunicación y contacto y el grado de confidencialidad. El asesoramiento en grupo puede ser absolutamente esencial para garantizar un acuerdo sin problemas entre las partes. Las recomendaciones del asesor pueden incluso incorporarse al contrato legal.
- Comprobación de antecedentes. Todas las partes tienen derecho a solicitar la comprobación de los antecedentes (incluidos los servicios de protección de menores, el historial crediticio y los antecedentes penales) de las otras partes.
- Visitadomiciliaria. Los futuros padres pueden solicitar una visita a domicilio con la madre de alquiler, o la agencia puede organizar que un trabajador social realice un breve estudio del hogar de la portadora. El objetivo es que los futuros padres se hagan una idea de su estilo de vida y del entorno en el que vivirá mientras lleve a su hijo. Si las partes lo solicitan, la agencia también puede organizar una visita de la madre de alquiler/portadora a la casa de los futuros padres.
- Acuerdo sobre las principales condiciones del contrato. Antes de redactar el contrato, las partes deben asegurarse de que están de acuerdo en las principales cuestiones, entre las que se incluyen las siguientes:
- Puntos de vista religiosos, abortistas y de reducción selectiva. Por lo general, las personas con una fuerte creencia a favor de la vida o del aborto deben ser emparejadas con alguien de la misma creencia. Por ejemplo, si una portadora gestacional tiene fuertes convicciones provida y no acepta abortar a un niño por ningún motivo, no debe ser emparejada con futuros padres que quieran que el feto sea abortado en determinadas circunstancias.
- Todas las condiciones financieras que se incluirán en el acuerdo, incluidos los gastos legales.
- Método de pago. Esto incluye si los pagos deben realizarse a través de un servicio de custodia y, en caso afirmativo, cuál.
- El nivel de confidencialidad tanto durante el acuerdo como una vez finalizado el contrato.
- Contacto y comunicación. El nivel de contacto y comunicación entre las partes, tanto durante el embarazo como después del nacimiento del niño.
- Las restricciones que se espera que tenga la portadora gestacional durante el embarazo. Aunque lo normal es que la madre de alquiler se abstenga de consumir drogas, alcohol y tabaco y siga las instrucciones de su ginecólogo, hay muchos otros factores que ahora son importantes, como no viajar a zonas en las que el virus del Zika sea un problema o realizar actividades demasiado extenuantes o peligrosas (por ejemplo, triatlones o paracaidismo) y mucho más.
- Planificación del patrimonio. Los futuros padres deben disponer de documentos de planificación patrimonial, o estar preparados para hacerlo tan pronto como se confirme el embarazo de la madre de alquiler o la portadora gestacional. En estos documentos, que entran en juego tras el fallecimiento de los padres intencionales, se nombrará a un tutor para el cuidado del niño y a un fideicomisario para garantizar el cumplimiento de las obligaciones financieras de los padres en virtud del contrato.