Detección y asesoramiento
La selección de la madre de alquiler y el asesoramiento de las partes -el componente de salud mental de un acuerdo de subrogación- son fundamentales para el éxito de la subrogación.
El sustituto se reunirá con un profesional de la salud mental que hará lo siguiente:
- Proporciona información sobre el proceso.
- Plantea y discute cuestiones psicológicas relacionadas con la subrogación.
- Revisa el historial de salud mental del sustituto.
- Se asegura de que la madre de alquiler tiene un sólido conocimiento de los riesgos psicológicos, de que se le han respondido todas sus preguntas y de que está emocionalmente preparada y capacitada para ser una madre de alquiler.
También se puede pedir a la madre de alquiler que complete una evaluación escrita. El asesor redactará un informe para el centro de fertilidad en el que recomendará a la madre de alquiler como participante o podrá recomendar que no participe.
El padre o los padres previstos también se reunirán con el consejero de salud mental para discutir el acuerdo de subrogación. Por lo general, hay una entrevista clínica adicional en la que los padres previstos y la madre de alquiler, junto con su cónyuge o pareja, mantienen una conversación conjunta. Esta conversación neutra, guiada por el consejero, ofrece una buena oportunidad para discutir las situaciones que podrían ocurrir durante el embarazo y decidir cómo las manejarán todos.
El asesoramiento debe estar disponible durante todo el acuerdo. El asesoramiento continuo en materia de salud mental proporciona apoyo y puede facilitar una relación sana entre las partes. El centro de fertilidad, el programa de emparejamiento o su abogado pueden recomendarle un asesor cualificado.
Cuando se realiza un viaje de gestación subrogada, también es imperativo que se verifiquen los antecedentes penales durante el proceso de selección de todos los adultos que participan en los arreglos, y posiblemente también los que viven en el hogar. Esto incluye a los padres previstos y a la madre de alquiler gestacional (y al cónyuge o a otras personas importantes que vivan en el hogar). Desde el punto de vista de la madre de alquiler, la realización de estas comprobaciones durante el asesoramiento de salud mental puede ayudar a garantizar que la familia con la que trabaja es apta y no tiene antecedentes penales. Desde el punto de vista de los futuros padres, puede proporcionarles la tranquilidad de que no hay antecedentes penales en el hogar. Por supuesto, para todas las partes, es importante calibrar la naturaleza de la actividad cuando aparece algo en una comprobación de antecedentes. Un delito menor no violento de hace 20 años puede no tener la misma importancia que un incidente más reciente.